ANADig: Detectan evasión por 2,4 millones de toneladas Equivale a la carga de 80 mil camiones. Las operaciones marginales rondarían los dos mil millones

domingo, 20 de junio de 2010

Detectan evasión por 2,4 millones de toneladas Equivale a la carga de 80 mil camiones. Las operaciones marginales rondarían los dos mil millones

En el último año, el fisco constató en la provincia de Córdoba operaciones de granos “en negro” por más de 2,4 millones de toneladas, la mayor parte de soja, equivalentes a la carga de 80 mil camiones. A valores de hoy, esas transacciones marginales ascenderían a unos dos mil millones de pesos.
Los casos fueron detectados e investigados por las dos delegaciones que la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) posee en la provincia: Córdoba y Río Cuarto.
El volumen de la mercadería involucrada no es menor, ya que equivale al 12 por ciento de la producción estimada de soja y maíz en Córdoba para la campaña que está cerrando (algo más de 20 millones de toneladas). Del total, 1,5 millón de toneladas fue detectado por la delegación Río Cuarto (que abarca todo el sur), mientras que la delegación Córdoba (extiende sus operaciones en el centro y norte de la provincia) descubrió unas 880 mil toneladas de soja y 31 mil de trigo y maíz en negro en lo que va de 2010. En este caso, la Afip calculó un monto involucrado superior a los 700 millones de pesos, de los cuales la evasión se estima en 105 millones.
Los procedimientos. En los últimos meses saltaron a la luz operativos de gran relevancia por su dimensión. En mayo se logró desbaratar una banda que habría realizado operaciones por unas 800 mil toneladas de soja, y que a la fecha arrojó un saldo de 29 imputados, de los cuales seis siguen detenidos y cinco están prófugos.
En la agencia del sur, se detectó a 450 productores del centro y sur de la provincia que habrían vendido más de 145 mil toneladas “en negro”, y a los responsables de los distintos tramos de una maniobra triangulada con empresas de Uruguay, que involucraría transacciones por 110 millones de pesos. Esto se suma a otro caso, en Oliva y Corralito, donde se vendieron granos de manera informal por 600 millones de pesos.
Según los funcionarios consultados, en promedio, cada investigación insume más de un año antes de convertirse en una denuncia judicial, en el marco de la ley penal tributaria. Antes de pasar el expediente a un juez, se debe determinar el perjuicio para el fisco. El último caso llevó más de ocho meses de seguimiento que incluyeron escuchas, cruce de datos y un detalle de los movimientos de dinero de varios contribuyentes.
En todos los casos se trata de verdaderas organizaciones delictivas montadas con complejos esquemas para evadir el pago de tributos. La maniobra más habitual es la compra de cereal informal a través de proveedores ficticios, para ocultar la identidad del productor que vende “en negro” (ver A13).
En octubre de 2009, la Afip Río Cuarto creó una nueva división de Fiscalización Agropecuaria. Las máximas autoridades de la delegación niegan que la ofensiva tenga origen en el conflicto del Gobierno con el sector.
Técnicos de cuatro áreas que recibieron a este diario aseguran que la decisión de crear esa oficina se debe a que, en el mapa económico regional, las tres cuartas partes de las actividades pasan por el campo. En el registro fiscal de granos que corresponde a la delegación sureña hay más de 15 mil operadores.
Denuncias. En la última década, la Afip Río Cuarto formalizó 163 denuncias penales por evasión. Más de la mitad de los trámites quedaron en suspenso el año pasado porque los acusados se acogieron al beneficio del último acuerdo fiscal. Y se hicieron sólo seis juicios, con condenas en todos los casos.
En la Afip Córdoba, en tanto, señalaron que en 2010 se formularon 17 denuncias penales, con un perjuicio fiscal que supera los nueve millones de pesos. Hasta la fecha, hay 34 causas elevadas a juicio en la Justicia Federal.
Tareas que suman. La delegación Río Cuarto realiza en forma anual un operativo de granos que incluye controles en ruta de cartas de porte, existencias de cereal en los acopios y allanamientos. Debido a la evolución en las maniobras evasivas, también realizan una reingeniería del contralor.
Hace seis años fue implementado un sistema de monitoreo satelital, aunque el sistema aún no mide rindes. Se espera que en poco tiempo se los empiece a calcular con los datos biométricos de los cultivos.
Desde el año pasado, la Afip apela a la incautación del cereal cuando el acopiador o transportista no puede acreditar el origen. Ponen como depositario a un tercero y nadie puede disponer de los granos. Si aparece el productor oculto, debe pagar las multas; si no se determina de dónde provienen los granos, los decomisan.
En los últimos seis meses hubo 15 casos. Unas 450 toneladas se secuestraron en controles de ruta con apoyo policial y de Gendarmería y 1.700 toneladas en plantas de acopio.
Como otros sectores
Los técnicos de la Afip aseguran que el nivel de evasión en el agro es similar al de cualquier otra actividad económica. Aunque hay sospechas de altos porcentajes, las inspecciones finalmente detectan operaciones marginales que rondan el 30 por ciento del total.

No hay comentarios:

Publicar un comentario